Albert Rivera: “La vivienda es la gallina de los huevos de oro del Estado”

Durante su paso por el pódcast 'En primera persona', de idealista/news, Albert Rivera no dudó en señalar lo que, a su juicio, es uno de los grandes tabúes del debate sobre vivienda en España: la fiscalidad. El exlíder de Ciudadanos, hoy alejado de la política y dedicado a la consultoría y a la formación, dibujó un diagnóstico contundente. “La vivienda se ha convertido en la gallina de los huevos de oro del Estado”, asevera.

Según explica, no se trata solo de un problema de escasez de oferta ni de un repunte coyuntural de la demanda, sino de una estructura fiscal que grava la vivienda en cada fase del proceso, desde la compra del suelo hasta la escrituración final.

Rivera recuerda que muchos ciudadanos no son conscientes de que entre una cuarta y una tercera parte del precio final de una vivienda son impuestos.
ITP, IVA, Actos Jurídicos Documentados, tasas urbanísticas, licencias, tributos municipales… una cadena que, afirma, encarece artificialmente el acceso a una casa. “Desde el primer paso del promotor hasta la entrega de llaves hay costes fiscales constantes. Es una recaudación brutal y sostenida en el tiempo”, señala 

El exnúmero uno de Ciudadanos sostiene que esta presión fiscal se ha convertido en una herramienta de financiación silenciosa para las distintas administraciones. Y por eso, advierte, nadie parece dispuesto a tocarla. “Las administraciones están muy cómodas. Recaudan como nunca y prefieren no abrir este melón”, puntualiza.

La clase media, atrapada entre impuestos y precios

Uno de los puntos en los que más insiste Rivera es en el colapso que vive la clase media. Aunque existen bonificaciones en algunos casos concretos, asegura que los umbrales son tan bajos que apenas resultan útiles. “Incluso un trabajador con un sueldo medio tiene hoy enormes dificultades para acceder a una vivienda”, lamenta.

Para él, ampliar exenciones y reducir impuestos en la primera vivienda habitual sería un paso lógico y coherente con el discurso oficial. “Si todos decimos que la vivienda es una necesidad básica, ¿por qué no aplicar un IVA superreducido como a otros bienes esenciales?”, se pregunta.

La reforma más inmediata (y la que nunca llega)

Rivera defiende que, a diferencia de cambios estructurales en urbanismo o suelo, que requieren años, la reducción fiscal tendría efectos casi instantáneos en el mercado. “Si bajáramos un 20% los impuestos asociados, los precios bajarían mañana mismo. No es teoría: es una decisión política” 

Su propuesta incluye:

• Rebajar ITP, especialmente en primera vivienda;
• Suprimir o reducir AJD;
• Aplicar un IVA reducido o superreducido temporal;
• Eliminar tasas duplicadas;
• Incentivar fiscalmente a promotores y pequeños propietarios.

Para Rivera, esto no solo facilitaría la compra, sino que aumentaría la oferta, porque muchos propietarios volverían a sacar pisos al mercado al percibir mayor seguridad y menor carga fiscal.

Pese a poner el foco en los impuestos, Rivera sitúa la fiscalidad dentro de una ecuación más amplia. España, explica, vive una combinación compleja de factores:

• Fuerte crecimiento poblacional
• Incremento de la demanda inversora
• Urbanismo lento
• Políticas intervencionistas que frenan la oferta
• Inseguridad jurídica derivada de la ocupación

“Si juntas la población creciendo, el atractivo inversor y que la vivienda vuelve a ser un valor refugio, tienes la tormenta perfecta”, avisa. A este cóctel, añade un urbanismo que considera “lento y obsoleto”, incapaz de generar nuevo suelo o facilitar trámites con la rapidez que exige el mercado actual.

Un pacto nacional que nunca llega

Ante este escenario, Rivera considera imprescindible un Pacto Nacional por la Vivienda que aborde de forma realista los problemas del mercado. “Si este es el principal problema del país, necesitamos un acuerdo serio, no más ruedas de prensa. Y ese acuerdo debe empezar por bajar impuestos”, finaliza

Para el expolítico, insistir en medidas de control de precios o limitar la compra por parte de extranjeros es “tapar el sol con un dedo”. En su opinión, la llave está en estimular la oferta y reducir la carga fiscal, no en castigar a quienes quieren invertir o a quienes ponen su vivienda en alquiler.

Industrialización y tecnología: soluciones para acelerar

Ante el urbanismo lento y la falta de suelo, Rivera defiende explorar soluciones innovadoras:

• Vivienda industrializada, capaz de levantarse en semanas o incluso días;
• Procesos constructivos más sostenibles;
• Concursos públicos que primen la rapidez, no solo el coste;
• Una visión estratégica a largo plazo para las infraestructuras.

Incluso menciona el futuro papel de los coches autónomos, capaces de cambiar la forma en que se conciben las conexiones entre núcleos urbanos y áreas residenciales.

Economía: crecimiento macro, empobrecimiento micro

Otro de los puntos centrales de la entrevista es la situación económica general. Rivera reconoce que el PIB crece pero critica que ese crecimiento no se traduce en una mejora del poder adquisitivo. “Los salarios no suben al ritmo de la inflación. El PIB va como un cohete, pero los ciudadanos no”, narra.

También advierte del nivel de deuda pública en España y en Europa, y alerta de que en los próximos años podrían llegar tensiones sociales si no se adoptan reformas profundas.