Las ventas de obra nueva cayeron un 10,5% hasta una tasa anual desestacionalizada de 657.000 unidades en enero. En contra, el precio medio de la vivienda nueva subió un 3,7% interanual
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Fuertes tormentas invernales en Kentucky
Fuertes tormentas invernales en Kentucky Getty images

Las ventas de viviendas unifamiliares nuevas en EE.UU. cayeron más de lo esperado en enero ante unos tipos hipotecarios todavía altos y el impacto de las tormentas de nieve y el clima extremadamente frío en gran parte del país. Según el Departamento de Comercio, las ventas de obra nueva cayeron un 10,5% hasta una tasa anual desestacionalizada de 657.000 unidades en enero. En contra, el precio medio de la vivienda nueva subió un 3,7% interanual, hasta los 446.300 dólares (426.000 euros al cambio), el nivel más alto desde octubre de 2022.  

Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que las ventas de viviendas nuevas, que representan alrededor del 15% de las ventas de viviendas en EE.UU., caerían a una tasa de 680.000 unidades.

Las ventas cayeron un 20% en el noreste y un 16,7% en el medio oeste, probablemente enfriadas por las gélidas temperaturas. Cayeron un 14,8% en el sur, densamente poblado, que también sufrió tormentas invernales, pero aumentaron un 7,7% en el oeste a pesar de los incendios forestales de California.

Las ventas de viviendas nuevas se contabilizan en el momento de la firma del contrato. En enero cayeron un 1,1% interanual. El precio medio de la vivienda nueva aumentó un 3,7% a 446.300 dólares en enero respecto al año anterior. Se trata del nivel más alto desde octubre de 2022. Esta subida se produce pese a que la oferta aumentó hasta niveles de diciembre de 2007. En concreto, el stock de viviendas nuevas aumentó en enero un 1,4%, hasta 495.000 unidades.

Unas 274.000 unidades estaban en construcción en enero, sin cambios respecto a diciembre, mientras que 115.000 unidades estaban terminadas, el nivel más alto desde agosto de 2009. Las 106.000 viviendas restantes estaban aún por construir, un máximo histórico. El aumento de la oferta podría hacer que los constructores se muestren reacios a iniciar nuevos proyectos inmobiliarios.

Y los permisos para la construcción de nuevas viviendas cayeron un 0,6% en enero, hasta 1.473 millones de unidades.

Por parte de la venta de viviendas usadas, también cayó en enero y la construcción de viviendas unifamiliares se desplomó. El gasto residencial, que incluye la construcción y la venta de viviendas, repuntó en el cuarto trimestre tras dos descensos trimestrales consecutivos.

Los tipos hipotecarios más altos se han combinado con los elevados precios de la vivienda para lastrar significativamente la asequibilidad. El tipo medio de una hipoteca a 30 años a tipo fijo rondó el 7% en diciembre, según datos de la agencia de financiación hipotecaria Freddie Mac. Ahora ha bajado hasta el 6,85%.

Los tipos hipotecarios se han mantenido elevados, a pesar de los recortes de 100 puntos básicos en los tipos de interés de la Reserva Federal desde septiembre. El banco central estadounidense pausó los recortes de tipos en enero mientras evalúa el impacto de las políticas de la administración Trump, como aranceles, recortes de impuestos y deportaciones masivas de inmigrantes, que los economistas consideran inflacionistas.

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