Encontrar una vivienda digna y asequible en España se ha convertido en un auténtico desafío, no solo para los jóvenes que quieren independizarse, sino también para las familias y las personas mayores sin casa en propiedad. Los precios han alcanzado cifras inalcanzables para muchos, especialmente en las grandes ciudades donde la demanda es muy superior, lo que ha obligado a muchos a trasladarse a la periferia.
Con motivo de esta problemática habitacional, la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid ha organizado el primer Congreso Nacional de Vivienda, que ha reunido a grandes responsables públicos del mercado.
Durante una mesa redonda moderada por la directora de idealista/news, Paloma Martínez-Almeida, los expertos han hecho hincapié en ciertas medidas que podrían desatacar el problema actual, entre ellos el incremento de la edificabilidad y la densidad de los nuevos edificios.
El viceconsejero de Vivienda de la Comunidad Autónoma de Madrid, José María García, ha resaltado esta medida ya aprobada en el nuevo plan de choque en materia de vivienda elaborado por el Gobierno regional. Esta medida aumenta en un 20% la densidad y en un 10% la edificabilidad de los terrenos donde se vayan a construir viviendas protegidas, sin necesidad de modificar planes urbanísticos, los cuales retrasan considerablemente el desarrollo residencial.
En esta misma línea se encuentra el secretario General del Territorio de la Generalidad de Cataluña, Jordi Terrades i Santacreu, que ha resaltado: “Ante el aumento de la población, tenemos que abrir un debate sobre el aumento de la densidad y de las alturas, sobre todo en las zonas metropolitanas donde el suelo es escaso y la demanda es muy alta”.
Sobre ello también ha hablado el viceconsejero de Vivienda del País Vasco, Miguel de los Toyos, quien ha asegurado que han contemplado estas medidas en nuevo decreto-ley de materias urgentes del Gobierno vasco.
La directora General de Vivienda de la Comunidad de Aragón, María Pía Canals, también se ha mostrado a favor de esta medida, pero dependiendo de la zona: “La sociedad está cambiando. El número de hogares ha aumentado y el tamaño de las familias ha disminuido, por ello tenemos que hacer casas más pequeñas en las grandes ciudades, como es el caso de Zaragoza, Huesca o Teruel en nuestro caso, y viviendas de mayor tamaño en aquellos municipios con menos demanda”.
Dejación de las AAPP en materia de vivienda
Pía Canals ha destacado que la “administración pública ha hecho una dejación de funciones en la construcción de vivienda pública desde la crisis y los inmuebles libres no han alcanzado el ritmo de hace años. Esto nos ha llevado al problema actual”.
Por su parte, su homólogo vasco ha enfatizado que “tras la crisis de 2008 no se ha hecho un diagnóstico certero. Esto no solo está creando una problemática económica, también social. Algunas familias destinan más de la mitad de su salario al pago de la vivienda. Y este problema sí tiene solución, pero no ahora, es a medio-largo plazo”.
Por último, Marcos Vaquer, Catedrático de Derecho Administrativo en la Universidad Carlos III, ha situado en el mismo escalón de importancia la colaboración público-privada y la colaboración público-pública: “Tenemos que mejorar la coordinación entre las tres instituciones. El Estado impone las leyes, las comunidades tienen la competencia y los ayuntamientos el conocimiento de la zona. Un mayor nexo agilizaría la llegada de la solución a este problema”.
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