La economía española ha sido una de las que más ha crecido en los últimos años, aunque algunas variables siguen preocupando a los organismos internacionales. Según un informe de la oficina de estadísticas europea, Eurostat, los desequilibrios que están en el punto de mira de Bruselas son el endeudamiento multimillonario de familias, empresas y Estado, el alto nivel de paro, la caída de la población activa y el déficit entre las inversiones realizadas en el exterior y las que capta de los extranjeros.