
Las nuevas casas de Pablo Iglesias e Irene Montero, los dos principales líderes parlamentarios de Podemos, y de José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno de España, se suman a la larga de compras inmobiliarias realizadas por políticos. Una tendencia que está traspasando fronteras y que se ha instalado en Portugal.
De hecho, el primer ministro ha realizado varias operaciones en el último año. Junto con su pareja Fernanda Tadeu, Antonio Costa ha comprado y vendido posteriormente un apartamento en Lisboa, ha adquirido otro en Santa Clara y ha vendido otra en Odivelas. Además, posee una casa en Sintra, otra en el Algarve y otra en Lisboa.
La operación más cuantiosa de todas es la compraventa de un apartamento en la capital lusa. La pareja adquirió el inmueble de apenas 40 m2 en abril de 2016 por 55.000 euros, y lo vendió el pasado marzo por unos 100.000. Es decir, en menos de un año el político ha conseguido una plusvalía que prácticamente duplica el precio que pagó.
Pero ese piso ha seguido cambiando de manos al calor de la mejora del mercado inmobiliario portugués: el inversor que compró la casa a Costa lo vendió a un apenas cuatro meses después por unos 370.000 euros.
A esa operación se suma la compra de un apartamento en la ciudad de Santa Clara por unos 100.000 euros, un inmueble que la pareja tiene actualmente en arrendamiento por unos 550 euros al mes. Dicha adquisición se produjo poco después de que Costa y Tadeu traspasaran otro inmueble en Odivelas por unos 47.000 euros a la firma Vasques&Navais, especializada en el sector inmobiliario.
¿Y qué tiene de patrimonio inmobiliario? Además de la casa que tiene alquilada en Santa Clara, Costa posee una casa en Sintra, otra en Lisboa, otra en el Algarve y otra en Margao (India), donde nació el padre del primer ministro.
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