El paso del huracán Ian por Florida ha dejado un rastro desolador con 110 fallecidos y unas pérdidas para las aseguradoras de 57.000 millones de dólares, unos 58.700 millones de euros, solo por detrás de los desastres provocados por el huracán Katrina en 2005. El Gobierno estatal juega un papel destacado en la cobertura de los seguros de hogar con una aseguradora de último recurso, en un mercado en el que se cobra unos 4.200 dólares (4.320 euros) al año, el triple que a nivel nacional. Sin embargo, Ian ha sido la puntilla para un sector en crisis, que ya cuenta con seis empresas en bancarrota.