
El Banco Central Europeo (BCE) ha cumplido el guion que esperaba el mercado. En la reunión de este 27 de octubre, la máxima autoridad monetaria y financiera en la eurozona ha anunciado una subida de los tipos de interés de 75 puntos básicos, el tercer repunte desde julio, hasta dejar el precio del dinero en el 2%. Un nivel en el que previsiblemente durará poco.
Los expertos dan por hecho que habrá más movimientos al alza en los próximos meses con el objetivo de frenar la escalada de la inflación, a pesar de que con ello aumenten los riesgos de recesión económica. Además, alertan de que ya se está produciendo un freno en el mercado hipotecario, a medida que los bancos están endureciendo las condiciones a la hora de conceder nuevos préstamos y que el euríbor está encareciendo las cuotas de los préstamos a tipo variable. Por último, creen que las subidas de tipos tardarán en trasladarse a los productos de ahorro como los depósitos o las cuentas, aunque las rentabilidades irán repuntando en los próximos meses.
Repasamos de las manos de los expertos algunas de las consecuencias de la nueva subida de tipos del BCE:
¿Por qué se suben los tipos de interés?
Las subidas de los tipos de interés que está aplicando el BCE tienen un objetivo claro: frenar la escalada de la inflación. Es decir, que los precios no suban a un ritmo tan alto como lo están haciendo.
Para el organismo, la inflación ‘ideal’ es la que se encuentra en torno al 2%; es decir, casi cinco veces por debajo del nivel en el que se mueve actualmente. Según los datos de la oficina de estadísticas comunitaria Eurostat, los precios crecieron en la eurozona un 9,9% en septiembre, lo que supone un nuevo máximo histórico. A pesar de que todo apunta a que la tendencia al alza se moderará en los próximos meses, las previsiones siguen situando a la inflación en unos niveles mucho más altos a los deseados tanto en 2022 como en 2023; anticipando así nuevas subidas de los tipos de interés.
“Las presiones inflacionistas se extienden por toda la economía europea y las expectativas de subida de precios se afianzan en los procesos de decisión de los agentes económicos. Aunque el contexto macroeconómico, muy volátil, justifica el enfoque del banco central "reunión por reunión", el BCE tendrá que aclarar su hoja de ruta. De cara a 2023, tendrá que elegir entre preservar la estabilidad financiera y luchar contra la inflación en un contexto de alto riesgo, especialmente en términos de crecimiento económico. El ejercicio promete ser delicado”, explica Mabrouk Chetouane, jefe de estrategia global de mercado de Natixis IM Solutions.
En esa misma línea, Miguel Córdoba, profesor de Economía Financiera de la Universidad CEU-San Pablo, recuerda que “la inflación no es buena para nada ni para nadie, por lo que, mientras persista, las cosas no van a ir bien. Si añadimos la guerra de Ucrania y el encarecimiento de las materias primas y de los suministros energéticos, estamos ante una tormenta perfecta. Los países más débiles, como España, van a sufrir mucho, ya que tendrán que pagar más por el servicio de la deuda, tendrán más déficit por subvencionar el gas y la gasolina, amén de los cheques “sociales”, etc. Todo ello nos llevará a un año 2023 de desastre y a una llamada seria de atención por parte de Bruselas”.
¿Cuánto van a subir los tipos de interés?

El guardián del euro ha aplicado tres subidas de los tipos de interés consecutivas, hasta dejar el tipo de referencia en el 2%, en máximos de 2009. Y seguirán subiendo, aunque la gran duda estos tiempos de incertidumbre es cuánto y cuándo.
El mercado predice otra subida en diciembre, de entre 50 y 75 puntos básicos, y que el precio del dinero alcance el 3%-3,5% durante la primera mitad de 2023. De cara al segundo semestre, si la inflación remite, podrían producirse subidas más moderadas (por regla general, los movimientos del BCE son de 25 puntos básicos, tanto al alza como a la baja).
Sin embargo, hay economistas que anticipan subidas más agresivas. Uno de ellos es Miguel Córdoba, quien opina que “en 2022 los tipos de interés deberían situarse entre el 3% y el 4%, siguiendo la estela de la Reserva Federal de EEUU. En 2023 no bajarán, pero la subida será más moderada, en función de la evolución de la inflación”. En cualquier caso, Córdoba no espera que los tipos superen el 5% en los próximos meses.
Juan Villén, responsable de idealista/hipotecas, también insiste que todo dependerá de la evolución de la inflación en lo que queda de año y en el próximo ejercicio. “Si con los niveles de subidas actuales no se empieza a constatar una caída paulatina en la inflación, seguramente veamos que el BCE mantiene su política de seguir apretando las clavijas y encareciendo el dinero”, sostiene.
Subir los tipos de interés: consecuencias en el tipo de interés hipotecario
Las subidas de los tipos de interés tienen un impacto directo en el mercado hipotecario y afectan tanto a quienes van a pedir una hipoteca como a los que ya tienen una contratada a tipo variable.
Cómo afecta la subida de tipos de interés a las nuevas hipotecas
El encarecimiento del precio del dinero está provocando un cambio de estrategia por parte de la banca. Durante los últimos años, y mientras el euríbor a 12 meses ha estado en terreno negativo, las entidades han apostado por los préstamos a tipo de interés fijo.
Pero a medida que el indicador de referencia para la mayoría de las hipotecas en España ha ido escalando posiciones (entró en terreno positivo en abril y ya se mueve en el entorno del 2,7% en tasa diaria), el sector financiero está subiendo el interés de su oferta a tipo fijo y bajando el de la variable.
Actualmente, Ibercaja es la única entidad que comercializa una hipoteca fija a 30 años con un tipo de interés bonificado inferior al 2%, ya que la mayoría de las ofertas se encuentran cerca del 3% e incluso por encima. Atrás quedaron los préstamos fijos a 20 y 30 años con tipos del 1%. En cambio, los tipos de interés de las hipotecas variables cada vez están más bajos, en un intento por compensar la subida del euríbor. En el comparador de idealista/hipotecas, por ejemplo, encontramos préstamos variables con un diferencial inferior al 0,7% + euríbor.
Pero, como insiste Juan Villén, esta bajada de los diferenciales “no significa que las hipotecas variables se están abaratando, al contrario, se están encareciendo: lo que los bancos hacen es reducir el diferencial que aplican, pero el euríbor ha subido tanto que la realidad es que las hipotecas variables son ahora mucho más caras que a principios de año”.
Por otro lado, los expertos explican que el complejo escenario económico actual, y con unos riesgos de recesión que cada vez van a más, los bancos están endureciendo los criterios que analizan a la hora de conceder nuevas hipotecas y, por tanto, muchas de las familias que hasta ahora sí podían optar a la financiación bancaria para la compra de una vivienda no puedan hacerlo a partir de ahora.
“El impacto se está notando ya, pues los tipos de interés más elevados incrementan el importe de las cuotas mensuales, lo que hace que algunas familias no tengan ingresos suficientes para este nuevo escenario. Por otro lado, los bancos están siendo algo más exigentes en la selección de clientes, ante un posible escenario futuro de recesión que pudiera impactar el nivel de empleo, o la renta disponible de las familias”, recalca el responsable de idealista/hipotecas.
Lo mismo opina Miguel Córdoba, quien recuerda que “los bancos han cerrado el grifo y son especialmente cuidadosos en revisar la capacidad de los prestatarios para satisfacer las cuotas hipotecarias. La subida de tipos afecta lógicamente a las cuotas mensuales y la renta disponible real de los ciudadanos disminuye por el efecto inflacionista que no se ha trasladado prácticamente a los salarios. Si suben los intereses y baja la capacidad de renta de los potenciales interesados en adquirir vivienda, el impacto va a ser bastante fuerte durante los próximos meses. Además, el efecto “expectativas” también actúa: ante la incertidumbre del futuro (guerra de Ucrania, inflación elevada y posible recesión), es lógico que los demandantes de hipoteca se retraigan y esperen “a ver qué pasa”. Endeudarse por 30 años no es una decisión fácil”.

¿Se pueden encarecer más las hipotecas?
La respuesta de los expertos es afirmativa ya que, por un lado, se esperan más subidas del euríbor; y, por otro, que los bancos sigan encareciendo su oferta a tipo fijo.
Se esperan más subidas del euríbor a 12 meses
La media mensual provisional del euríbor a 12 meses se encuentra actualmente por encima del 2,6%, máximos desde principios de 2009. Y las previsiones apuntan a que podría cerrar el año cerca del 3% y que seguirá subiendo, al son de cómo evolucionen los tipos de interés.
¿Hasta dónde llegará el euríbor? Los expertos coinciden en que no se puede predecir, aunque tampoco descartan que pueda llegar al 5% en el futuro. “En julio de 2008 llegó al 5,6%, y antes del euro -en entornos de inflación como el actual- tuvimos tipos de interés de 2 dígitos. No digo que vayamos a llegar a esos niveles, que sería un problema grande, pero tampoco se puede descartar”, opina Villén.
Como recuerda Javier Fernández-Pacheco, profesor de EAE Business School, “el euríbor, como tal, no tiene techo. Dado que es un reflejo del precio al que los bancos se prestan dinero entre ellos, nada impide que los bancos puedan solicitar un interés de dos dígitos para prestar dinero si ocurren dos circunstancias. La primera es que no haya otra oferta que sea más atractiva, pues en ese caso la otra parte contrataría esa oferta más atractiva. La segunda es que puedan prestar dinero a empresas y particular a un tipo de interés lo suficientemente elevado como para que compense pagar ese precio”.
A pesar de ello, que el euríbor vuelva a niveles de 2008 no es la hipótesis más previsible actualmente. Según Miguel Córdoba, un escenario más lógico es que el euríbor no supere el 4% en 2023, aunque siempre que la inflación se quede entre el 3% y el 5% en términos medios a lo largo de 2023.
La banca podría encarecer más las hipotecas fijas
Por otro lado, el mercado no descarta que los bancos sigan subiendo los tipos de interés de su oferta de hipoteca fijas. “Bajar más los tipos de las variables no creo, porque los diferenciales ya están muy ajustados, pero muy posiblemente sí podrían subir más las fijas mientras tengamos inflación”, argumenta Manuel Romera, director del sector financiero de IE Business School.
Lo mismo opina Miguel Córdoba, quien explica que “las ofertas variables deben tener un margen adecuado para que otorgar una hipoteca sea rentable para el banco. Por tanto, su abaratamiento no tiene excesivo sentido. En cuanto a las hipotecas a tipo fijo, tienen necesariamente que seguir subiendo, siguiendo la estela del euríbor y de la curva de tipos a largo plazo. Debemos poner el foco en la deuda pública a 10 años y en la curva ‘midswap’ a cinco años para ver la evolución de los tipos de las hipotecas a tipo fijo”.
“Tenemos que pensar que lo ocurrido en los últimos años con los tipos de interés en negativo es una aberración económica que dentro de unos años se estudiará en historia económica como uno de los grandes errores de la política monetaria del BCE. Lo normal es que se pague por pedir dinero prestado y si se consigue un tipo fijo, se está trasladando todo el riesgo al prestatario, es decir, al banco, que tiene que asumir un ingreso fijo. Un 4% o un 5% es un tipo bastante razonable para una hipoteca a 30 años”, puntualiza el profesor de Economía Financiera de la Universidad CEU-San Pablo.
El responsable de idealista/hipotecas, por su parte, cree que “si se empieza a ver la reducción de la inflación, que es el escenario principal, lo normal es que los tipos a largo plazo no se vean muy afectados, por lo que las hipotecas fijas podrían no encarecerse mucho más. Pero si la inflación se mantiene en niveles elevados, podríamos presenciar otro rally de subidas de precio en las hipotecas fijas”.
¿La subida de tipos de interés podría provocar una recesión económica?
La actividad económica ya se está frenando y el riesgo de recesión es cada vez más evidente en la eurozona.
“La línea que separa el “aterrizaje suave” de la recesión es muy fina. Hay voces que niegan por el momento la posibilidad de la recesión, como el FMI, mientras que otras lo ven cada vez más probable, cuando no lo dan ya por seguro como la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). Lo que parece claro es que, si se producen sucesivas subidas de tipos, tal y como apunta el BCE, estaríamos más cerca de la recesión”, recuerda el profesor de EAE Business School.
Para Manuel Romera, la contracción económica es casi segura en países como Alemania o EEUU y probable en el caso de España, mientras que Miguel Córdoba alerta de que “la recesión es un hecho, ya que el crecimiento del PIB en el segundo semestre de 2022 va a ser muy pequeño o incluso nulo, y si tenemos en cuenta el efecto de la inflación, lo que está ocurriendo de facto es que se está produciendo menos. Para el año 2023 el problema se agravará, ya que el primer semestre de 2022 fue bueno en crecimiento y al hacer la comparativa interanual, las cifras saldrán negativas. Además, se está produciendo una disminución de la concesión de crédito por parte de los bancos y un retraimiento del consumo por parte de los ciudadanos, lo cual anticipa una crisis importante de demanda para el año 2023 y un PIB que podría ser negativo buena parte del año”.

¿Cuándo subirán los tipos de interés de los depósitos y cuentas?
Una de las repercusiones positivas de las subidas de los tipos de interés es que impulsan la rentabilidad de productos de ahorro tradicionales, como los depósitos bancarios o las cuentas remuneradas.
Ha pasado una década desde que el tipo medio de los depósitos a plazo cayó por primera vez por debajo del 2%. Fue el comienzo de una travesía del desierto que ha dejado sin alternativas a los ahorradores que históricamente confiaban su dinero a los depósitos a plazo y las cuentas remuneradas. Ahora, ambos productos empiezan a remontar el vuelo de la mano del Banco Central Europeo.
Sin embargo, los economistas consultados por idealista/news descartan fuertes subidas de los rendimientos a corto plazo. “Los bancos están muy reticentes a pagar por los depósitos, al menos un interés elevado. Han estado muchos años sufriendo los tipos de interés negativos y ahora pretenden recuperar lo que no pudieron ganar por la errónea política del BCE”, asevera Miguel Córdoba.
En líneas generales, consideran que las remuneraciones deberían situarse entre el 1% y el 3% durante el próximo año, y que, por tanto, se mantengan por debajo del euríbor.
En este sentido, Fernández-Pacheco insiste en que “lo que no era lógico era la situación que teníamos hasta ahora, en la que la remuneración de las cuentas y depósitos estaba por encima del euríbor. Los bancos tienen dos maneras fundamentales de conseguir el dinero que luego emplearán en prestar a empresas y particulares. La primera son los depósitos y cuentas corrientes de sus clientes. La segunda son los préstamos que se hacen entre bancos en el mercado interbancario. Pues bien, el euríbor refleja el tipo de interés al que los bancos se prestan entre ellos. Evidentemente, es más costoso para un banco conseguir 100 millones de euros a base de pequeños depositantes (con toda la operativa asociada), que conseguirlos de golpe con un préstamo de otro banco. Y por ello estará dispuesto a pagar más por el segundo que por el primero. Ese pagar más o pagar menos, es precisamente el tipo de interés. Y es por ello que el tipo de los depósitos y cuentas corrientes se debería mantener por debajo del euríbor”.
Con todo, los economistas también recuerdan que el escenario actual también tiene lecturas positivas. “El BCE ha cambiado por fin su política monetaria y con unos tipos de interés en los niveles lógicos, el dinero volverá a tener su adecuada retribución en depósitos y letras del tesoro, e incluso de bonos del Estado, lo cual conllevará que no sea solamente el BCE el que compre deuda pública española, es decir, particulares y fondos de inversión y pensiones volverán a invertir en España y adquirirán, con una adecuada prima de riesgo, los valores emitidos por el Estado español”, insiste Miguel Córdoba. Además, el euro está ganando terreno frente al dólar y ha vuelto a recuperar la paridad.
El calendario del BCE que marca más subidas de los tipos de interés
Cada seis semanas, el Consejo de Gobierno del guardián del euro mantiene un encuentro en el que toma decisión de política monetaria y es ahí donde se anuncia si los tipos suben, bajan o se mantienen igual. Las fechas de las próximas reuniones del BCE donde podría anunciarse más subidas de los tipos de interés son:
- 15 de diciembre de 2022
- 2 de febrero de 2023
- 16 de marzo de 2023
- 4 de mayo de 2023
- 15 de junio de 2023
3 Comentarios:
Seguimos siendo las marionetas de este circo. Leo y leo empresas con beneficios brutales, subidas de precios bestiales en el supermercado en todo y te dicen que es por la subida de materia prima, suministros etc pero luego piensas tomando como ejemplo la leche que la materia prima se la han subido al ganadero con los piensos, transportes, suministros ... y resulta que le pagan la leche al mismo precio al pobre hombre que antes de toda esta subida. ¿que nos estamos perdiendo? Hoy lei la brutalidad de beneficios de unicaja, y resulta que ahora quieren cobrar por cada apunte en la libreta 60 centimos. En su dia decian que las comisiones era para paliar que el euribor estuviese en negativo, ahora suben el euribor brutalmente y siguen subiendo las comisiones, ¿porque? ¿que gastos son esos de mantenimiento? ¿Tienen a una persona limpiando de polvo las cuentas de cada cliente? Terminará explotando algun dia, supongo que a ojos de los de arriba los de abajo estaban creciendo mas de lo debido y ya hace tiempo que no se seguian las recomendaciones de comer yogures caducados.
No entiendo lo que el título del artículo tiene que ver con el articulo.
No veo en que medida se “premia el ahorro”.
Mientras el tipo de inflación se sitúe por encima de la remuneración de las cuentas, cuanto más ahorres, mas valor pierden tus ahorros.
Pero bueno, Uds sabrán.
Ahorrar? Nos estan tomando el pelo!
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