La autoridad monetaria terminará el próximo mes las compras de activos y subirá el precio del dinero hasta el 0,25%
Comentarios: 0
El BCE anuncia subidas de los tipos de interés
BCE

El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido que las compras netas al amparo de su programa de compra de activos públicos (APP, por sus siglas en inglés) finalizarán en el mes de julio, tal y como habían ido adelantando los miembros del Comité Ejecutivo en las últimas semanas.

Asimismo, con el objetivo de poner freno a la inflación, el BCE ha adelantado que en su reunión del 9 de julio acometerá una subida de 25 puntos básicos de los tipos de interés. Además, ha avanzado otra subida de tipos en septiembre, aunque en este caso no ha mencionado el volumen de dicho incremento. El mercado, no obstante, empieza a dar por hecho que el repunte a la vuelta del verano será de 50 puntos básicos, lo que dejaría los tipos de interés en el 0,75%.

Los tipos podrían llegar al 1%-1,5% este año 

La de julio será la primera subida del precio del dinero en la eurozona desde 2011 y es consecuencia de la elevada inflación, que se encuentra actualmente en los máximos históricos del 8% en la región de la zona común. 

La presidenta del guardián del euro, Christine Lagarde, ha explicado que los movimientos de julio y septiembre no serán aislados, sino el primer paso en una senda "gradual y sostenida" de incrementos para combatir una tasa de inflación "indeseablemente" elevada.

Buena parte del mercado da por hecho que los tipos de interés terminarán el año en torno al 1%, según estiman muchos economistas e incluso el Banco de España, mientras que organismos como el Real Instituto Elcano creen que podrían alcanzar el 1,5%, en línea con las últimas estimaciones de Bank of América, aunque hay previsiones que apuntan incluso a un nivel superior. Todo dependerá de cómo evolucionen la economía y los precios en los próximos meses.

Pedro del Pozo, director de inversiones financieras de Mutualidad de la Abogacía, explica que "el BCE ha variado su postura, pasando a tener ahora como escenario central de inflación el marco anteriormente calificado como “adverso”. En ese sentido, el mercado interpreta que el punto de llegada en los tipos de interés no será el 1,5%, sino el 2%. Ello implica una mayor velocidad de subida del precio del dinero, lo que ha impactado de manera instantánea y negativa sobre los mercados financieros". 

Por otro lado, Silvia Dall'Angelo, economista senior de Federated Hermes Limited, recalca que "es poco probable que el ciclo de endurecimiento del BCE sea un camino de rosas. El banco central tendrá que caminar por una línea muy fina ante una disyuntiva de crecimiento-inflación adversa y en constante evolución. Si bien la inflación podría resultar más sólida y generalizada de lo previsto, lo que exigiría una respuesta más agresiva por parte del banco central, los riesgos a la baja siguen dominando las perspectivas económicas. La guerra en Ucrania sigue su curso y aún podrían producirse escaladas que den lugar a la interrupción del suministro de gas y al racionamiento de la energía. Además, a medida que aumenten los tipos de interés, es probable que surja una fragmentación del mercado y que los bonos soberanos periféricos sufran una presión adicional". Y añade que "la opcionalidad, la dependencia de los datos, el carácter gradual y la flexibilidad seguirán siendo claves a medida que avance el proceso de normalización del BCE".

Impacto en las familias y los autónomos

Este giro de la política monetaria lastrará a los hogares endeudados que estén pagando una hipoteca a tipo de interés variable referenciada al euríbor, ya que encarecerá las cuotas mensuales. Además, las subidas de los tipos de interés mermarán la capacidad de consumo y ahorro de las familias.

De hecho, los expertos lanzan un mensaje de advertencia a quienes estén pagando una hipoteca o un préstamo variable referenciado al euríbor: se avecina una fuerte subida de las cuotas que podría ser peor de lo que se espera actualmente.

“Para quienes estén pagando una hipoteca variable, la subida de los tipos de interés supone una detracción importante de la renta, lo que retrotraerá el consumo”, señala María Jesús Fernández, economista senior de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas)

Juan Villén, responsable de idealista/hipotecas, también habla de la reducción de la renta disponible de las familias como consecuencia de las futuras subidas de los tipos de interés, así como la reducción de la capacidad de ahorro. “La alta inflación -cuando es superior a la subida de rentas – implica un mayor gasto, y la subida de las cuotas hipotecarias (para quienes tengan préstamos a tipo variable), también implicarán un mayor gasto que no se podrá dedicar a otros fines o al ahorro. Esto puede ralentizar el crecimiento económico, e incluso tener un efecto negativo en el empleo e incrementar la morosidad”, explica Villén.

Su visión la comparte el profesor de EAE Business School, Juan Carlos Higueras, quien añade que “las familias con préstamos indexados al euríbor tendrán una repercusión directa en el momento de la renovación (normalmente anual) de sus condiciones. Esto afecta a los préstamos al consumo, pero sobre todo a la gran base de crédito hipotecario a tipo variable que hay en España. También afectará a aquellos que quieran la concesión de un crédito que lo tendrán más difícil para la concesión (al aumentar las cuotas a pagar) y el propio pago de dichas cuotas en relación a los ingresos familiares”.

Por su parte, Manuel Romera, director del Sector Financiero en IE Business School, alerta de los efectos que puede tener este cambio en política monetaria sobre todo a medio plazo. “Como la mayoría de las hipotecas vivas son a tipo variable y a largo plazo, la cuota subirá bastante más de lo que la gente quiere pensar en los próximos cinco años. Si el euríbor a medio plazo se sitúa en los alrededores del 3%, las cuotas de las hipotecas pueden subir un 50%”, advierte.

De momento, el euríbor está descontando ya el encarecimiento del precio del dinero y registra una media mensual provisional en junio cercana al 0,5%, lo que se traduce en el nivel más alto desde verano de 2014, tras haber entrado en terreno positivo en abril. Y las previsiones apuntan a que seguirá subiendo con fuerza en los próximos meses. Recientemente, el economista y director general del Institut d'Estudis Financers (IEF), Josep Soler, ha asegurado que el indicador de referencia para tres de cada cuatro hipotecas en España puede subir hasta el 1,5% de cara a finales de año.

Las alternativas de inversión tradicionales ganan atractivo

Por otro lado, los inversores tendrán más alternativas de inversión a partir de ahora, ya que con las subidas de tipos también se incrementarán las rentabilidades de algunos productos financieros tradicionales con menos riesgo que el ladrillo, como los depósitos bancarios o los bonos. Incluso los dividendos ganarán atractivo entre los ahorradores, amenazando así la supremacía de la inversión en vivienda, que en los últimos trimestres se ha convertido en un valor refugio.

Conviene recordar que se puede invertir en letras y bonos del Tesoro a partir de 1.000 euros, y que los rendimientos de la deuda pública ya son positivos para los plazos a partir de los 12 meses. Las letras a un año, sin ir más lejos, ofrecen una rentabilidad por primera vez desde abril de 2020, el peor momento de la pandemia. Por su parte, los bonos del Estado a tres años dan el 1,03%, rentabilidad que salta hasta el 1,38% a cinco años. 

En el caso de los depósitos bancarios, a 12 meses las mejores ofertas se acercan ya al 1%, nivel que sí es posible alcanzar en los depósitos a dos años más generosos, que llegan hasta el 1,3%. De momento, estas ofertas se circunscriben a unas pocas entidades europeas de tamaño pequeño o mediano, entre las que no hay ninguna de las grandes españolas. 

Por último, las empresas con mayores y más estables dividendos del mundo son ahora muy demandadas por los inversores. El gigante estadounidense Morgan Stanley señala a 42 empresas con una rentabilidad por dividendo media de algo más del 5% que pueden ofrecer retornos de doble dígito con un riesgo bajo. Hay bancos como BBVA o UniCredit, constructoras como Eiffage, gigantes del consumo como Unilever, ‘utilities’ como Iberdrola o aseguradoras como Allianz.

Y también un amplio grupo de inmobiliarias como British Land, Covivio, Gecina, Land Securities, Leg Inmobilien y Vonovia. Por lo tanto, hay otra vía para diversificar en la inversión inmobiliaria, a través de empresas cotizadas del sector saneadas con dividendos que pueden crecer. Un caso especialmente llamativo es el de la bolsa española, en la que las mayores promotoras inmobiliarias están haciendo una exhibición de fuerza.

En estos momentos, Metrovacesa y Aedas cuentan con la rentabilidad por dividendo más alta del mercado nacional, del 12% y del 10% respectivamente. Por encima del nivel del 5% también se sitúan las socimis Lar España y Merlin Properties.

 

Ver comentarios (0) / Comentar

Para poder comentar debes Acceder con tu cuenta